El yoga es para todos sin importar edad, sexo, complexión, religión, condición física, etc. Es una práctica muy antigua originada en la India donde unes tu cuerpo, tu mente y tu espíritu. Yoga literalmente significa unir. Esta unión de cuerpo-mente-espíritu nos hacer conocernos más y tener mejor control sobre nuestros actos y emociones. “Los Yoga Sutras;” el libro sagrado del Yoga, define al Yoga como “El control de las fluctuaciones de la mente.” Esto quiere decir que estar con nuestra atención sobre algo en específico para que nuestra mente se calme y estar más en paz. Hay mucho tipos de yoga, en el yoga donde trabajamos a través de “asanas” (posturas) la meditación es en movimiento. Pones tu cuerpo a trabajar para estar presente y para que al final puede relajarte por completo. El estilo de yoga que yo imparto es para gente determinada y que tiene valor. Se requiere mucho esfuerzo físico pero también mental, y me topo muchas veces con gente que dice nunca me imagine que eso es el yoga. Hay muchos estilo de yoga lo importante es que encuentres el estilo en donde puedas estar cómodo, avanzar en tu práctica y que respires durante todo el proceso.
Hay algunos estereotipos del yoga, que es solo respirando, que están sentado con los ojos cerrados todo el tiempo, que es para viejitos, que es solo para mujeres, que es una religión y demás. Pero cuando entras a probar una clase te sorprendes de los beneficios inmediatos que sientes. Sin importar quien eres ni de donde vienes, tienes aquí un momento para ti. Donde lo único importante es que respires.
El yoga más que “fitness” es una oportunidad de conocerte, de RESPIRAR con conciencia de conectarte con tu interior y así ir quitando miedos que traemos guardados en nuestro ser. Es terapéutico y sanador y se adapta a cualquier persona. Lo pueden practicar desde un niño hasta un anciano. Es una práctica que te optimiza de manera física, mental y emocional.
Aprendes a respirar con tus movimientos lo cual conecta tu cuerpo con tu mente. Te enseña a conectarte con tus emociones para poder ser un poco más asertivos a la hora de reaccionar ante lo que nos sucede. Descargas la energía negativa que vamos cargando para poder estar más presente en el aquí y el ahora. Es meditación en movimiento lo cual hace que las historias que creamos en nuestra mente se queden por un ratito en silencio. Es ahí donde escuchas a tu interior y aprender a aceptarte como eres y que todo es perfecto.
Te invito a probar una clase en el shala (centro de yoga) más cercano a tu casa, cambiará tu vida.